Buscar este blog

martes, 12 de mayo de 2015

Nuestra última novela: "El sueño del jardinero", de José Miguel Soriano Bel

Hoy os queremos presentar la última novela de José Miguel Soriano Bel, la primera que publica en Siníndice:

"El sueño del jardinero"
1ª edición: Logroño, Siníndice, 2015
Autor: José Miguel Soriano Bel
PVP en librerías: 20 €. Precio bajo pedido directo a info@sinindice.es: 20 € (incluyendo gastos de envío)


Cuando acabé de escribir la primera página, de corrido, como si tuviera prisa en terminarla, ya tenía decidido que la llamaría “el incidente”, sí, un título vulgar, pero expresivo de lo que había pensado escribir: una catástrofe, de origen desconocido, destruye nuestra civilización y deja a los pocos sobrevivientes a merced del caos. Pero, después de diez páginas, en las que apenas había avanzado nada más que en la descripción de los personajes, me di cuenta de que la ciudad derruida y sus moradores fortuitos (fortuitos porque el destino de mi mano me llevaba a salvarlos) eran demasiado ingenuos con el incidente, como si en verdad no se creyeran que hubiera aparecido de improviso para eliminar cualquier vestigio de su anterior vida en la ciudad civilizada y pletórica
Me di cuenta de que la ciudad que he llamado pletórica, porque aún se mantenía en pie, escondía la enfermedad que todas las ciudades ocultan antes de caer devastadas por una catástrofe: la insolidaridad, la codicia, la ambición, la discriminación racial. Me di cuenta que el incidente había logrado renacer en las conciencias de los sobrevivientes conceptos que solo habían sido fabulados por los farsantes. Y, entonces, reconocí que “el incidente” solo era un sueño del personaje que finalmente dio título a la obra y también de aquellos otros que le acompañaban entre los escombros de la ciudad derruida (un abogado prestigioso, un arquitecto culto, una mujer punk), comparsas de un sueño colectivo, de todos los que, hasta ese momento, habíamos creído que la ciudad era nuestra, solo nuestra.
Hubiera deseado que el jardinero no despertara de su sueño, pero la cruel realidad impuso su ley. No pude evitarlo, y tanto que lo siento, pero mi personaje preferido, precisamente porque no era un revolucionario y porque quería ser uno más de aquellos que solo piensan en jugar al bingo, fue brutalmente engullido por el sistema de la ciudad podrida. Ni siquiera pude evitar aclarar el final trágico de su atrevimiento, cuando ya la novela estaba terminada, ni siquiera pude salvarle por más empeño que puse en hacerle justicia, lo único que pude hacer con él es que no perdiera la esperanza de que algún día su historia se llamara “el incidente”.
José Miguel Soriano Bel



No hay comentarios:

Publicar un comentario